Hoy es Luna Rítmica Rojo.
Tiempo de equilibrio emocional.
Hoy encuentra tu ritmos interno, deja de mirar hacia afuera para tomar decisiones. Cuando nos ocupamos de mirar afuera nos metemos en las vidas de otros, empezamos a sentir que sabemos lo que el otro debería hacer, o creemos que nosotros lo haríamos mejor, o le insistimos para que se atreva a tomar alguna decisión, en fin, de cualquier modo de lo único que podemos ocuparnos realmente es de nosotros mismos. Cada vez que tu mirada se desenfoca de vos e invade la vida de otra persona, y aún con las mejores intenciones, siempre estamos abandonando, aunque sea por un rato, nuestro propio eje, perdemos objetividad, permitimos que nuestras emociones se confundan, nos cargamos con cosas que no nos están pasando y lo que pasa comúnmente es que descuidamos las cosas que sí nos están pasando, nos auto-engañamos. Esto de ninguna manera quiere decir que no hay que ayudar, compartir, escuchar o cualquier tipo de intercambio con el prójimo, lo que quiere decir es que cualquier cosa que queramos abordar sin conciencia y respeto por nosotros mismos en primer lugar, nos va a traer consecuencias que no deseamos, lo que vamos a compartir no será tan rico, la ayuda que podamos dar será deficiente y seguramente nos costará mucho escuchar al otro si somos incapaces de atendernos a nosotros mismos.
La luna te invita a fluir, a fluir por la vida con tu propio ritmo, a tu tiempo, a ordenar tus emociones, dejar que aflore lo que tiene que aflorar, permitir que el amor vuelva a calentar nuestros corazones. Al encontrar el propio ritmo todo se ordena, el equilibrio interno se restaura, vuelve la estabilidad a la mente, permite que la intuición te guíe por donde tengas que ir, eres como el agua, no te desbordes. Bendiciones
Tiempo de equilibrio emocional.
Hoy encuentra tu ritmos interno, deja de mirar hacia afuera para tomar decisiones. Cuando nos ocupamos de mirar afuera nos metemos en las vidas de otros, empezamos a sentir que sabemos lo que el otro debería hacer, o creemos que nosotros lo haríamos mejor, o le insistimos para que se atreva a tomar alguna decisión, en fin, de cualquier modo de lo único que podemos ocuparnos realmente es de nosotros mismos. Cada vez que tu mirada se desenfoca de vos e invade la vida de otra persona, y aún con las mejores intenciones, siempre estamos abandonando, aunque sea por un rato, nuestro propio eje, perdemos objetividad, permitimos que nuestras emociones se confundan, nos cargamos con cosas que no nos están pasando y lo que pasa comúnmente es que descuidamos las cosas que sí nos están pasando, nos auto-engañamos. Esto de ninguna manera quiere decir que no hay que ayudar, compartir, escuchar o cualquier tipo de intercambio con el prójimo, lo que quiere decir es que cualquier cosa que queramos abordar sin conciencia y respeto por nosotros mismos en primer lugar, nos va a traer consecuencias que no deseamos, lo que vamos a compartir no será tan rico, la ayuda que podamos dar será deficiente y seguramente nos costará mucho escuchar al otro si somos incapaces de atendernos a nosotros mismos.
La luna te invita a fluir, a fluir por la vida con tu propio ritmo, a tu tiempo, a ordenar tus emociones, dejar que aflore lo que tiene que aflorar, permitir que el amor vuelva a calentar nuestros corazones. Al encontrar el propio ritmo todo se ordena, el equilibrio interno se restaura, vuelve la estabilidad a la mente, permite que la intuición te guíe por donde tengas que ir, eres como el agua, no te desbordes. Bendiciones
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