Definiendo la siembra.
¿Sabés qué sembrás?, ¿cómo sembrás?, cada pensamiento, cada palabra, cada idea que se genera en nosotros es parte de lo que sembramos en nuestro mundo. A veces no sabemos bien donde estamos parados, ¿cuantas son las veces que reconoces que cuando fuiste creado también fueron creados todos los otros reinos?, ¿con qué respeto tratas a las cosas que te sirven en tu vida, con qué frecuencia reconoces al suelo que pisas como un ser vivo igual que vos?. Hoy la semilla en el tono 4 (auto-existente de la forma), nos invita a hacernos concientes de que antes de sembrar hay que establecer los límites, definir donde, cómo, saber qué es lo que queremos generar. La semilla te enseña que siempre algo nuevo puede crecer, es ese germen que dará fruto y ese fruto dará una nueva semilla, y así la evolución es infinita. Abre tu mente y hazte conciente de lo que quieres para tu vida para que tus acciones sean esa semilla que se riega a tu paso, cuida lo que generas para que esa semilla florezca cuidada y amada, deja de ser rígido para poder abrirte a recibir y dar los dones del universo. Nosotros los humanos somos la siembra de de Dios en esta tierra, también somos sembradores, toda acción que sale de nosotros germina. ¿que vas a sembrar hoy para tu vida?, eso es lo que vas a cosechar. Despierta a la conciencia de que tienes ese poder de elegir lo que quieres que sea parte de tu vida, el tiempo es ahora, el espacio es aquí, la voluntad es sólo tuya. Bendiciones.
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